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¿Tiene sexo el cerebro?

Adreissa L. Páez-Michel

¿Cómo ves?

Nuestras ideas sobre las capacidades de los sexos están sujetas a muchos estereotipos; por ejemplo, que las mujeres son más hábiles para las tareas simultáneas y el lenguaje y que los varones las superan en matemáticas y orientación. El asunto es saber si es verdad, y si estas habilidades son congénitas o aprendidas.

Algunas investigaciones científicas sugieren que el cerebro tiene sexo, es decir, confirman que hay diferencias entre los cerebros de hombres y mujeres; aunque por supuesto ninguno es superior al otro, existen ciertas tareas que uno u otro sexo realizan mejor, en promedio.

Una lectura poco crítica de estas investigaciones podría dejarnos con la impresión de que somos como somos porque así nacimos. Hay que observar que, si bien las diferencias en las habilidades se deben a una organización neuronal distinta entre los sexos, tal organización depende tanto de nuestra fisiología como de las actividades que realizamos durante nuestro crecimiento (aprendizaje). Pretender explicar nuestras capacidades sólo en función de nuestro organismo, y así clasificarlas según el sexo, no sólo es parcial, sino que puede resultar peligroso para la comprensión que tenemos de nosotros mismos.