De entrada 72

Estrella Burgos

En materia de especies, las de insectos constituyen una mayoría abrumadora: se han registrado más de un millón —de mamíferos hay apenas 4 500— y es posible que aún quede por descubrir una cantidad de varias veces esa cifra. Son los verdaderos dueños del medio terrestre. Desde los molestos mosquitos hasta las más bellas mariposas, pasando por el “cara de niño” y el terrible escarabajo elefante, en el artículo de portada Renato Gómez da cuenta de la asombrosa diversidad de los insectos, sus formas de vida y cómo han llegado a conquistar casi todos los territorios. No así el mar, cuyas profundidades y las extrañas criaturas que los habitan, materia de leyendas y grandes obras literarias, son el tema que aborda Erica Torrens en la página 22.

Pero ni insectos ni monstruos marinos, y ninguna otra forma de vida, serían posibles sin una sustancia de propiedades sumamente peculiares: el agua. A fin de apreciar las características que hacen del agua el líquido vital es preciso zambullirse en su naturaleza molecular, que con justicia puede calificarse de extravagante, y para ello Margarita Bernal y Gertrudis Uruchurtu han preparado un recorrido minucioso que encontrarás en la página 30. Por su parte, María Emilia Beyer presenta en la sección “Así fue” una historia dedicada al paladar. “Del cacao al chocolate” inicia en el México prehispánico y concluye en nuestros días, después de llevarnos a las cortes europeas, con una serie de sabrosas anécdotas y los detalles de cómo responde nuestro organismo a una de las golosinas más populares.

Para discutir a la hora del postre, que bien podría ser un chocolate, te ofrecemos un texto de Jorge Wagensberg sobre la intuición científica y los alcances de cada familia de números, “los reales no lo pueden todo” asegura, y lo indispensables que son.