¿Quién es? 246

Alice Poma

Anayansin Inzunza

Alice Poma nació en Pieve di Cadore, un pueblo del norte de Italia rodeado de montañas que en invierno se pinta de blanco por la nieve. Cuando tenía tres años aprendió a esquiar, deporte que le fascina por la sensación de libertad que brinda y la adrenalina que se libera con la velocidad. “Era una niña alegre que jugaba en el bosque, montaba en bicicleta y amaba a los animales, especialmente a los gatos que son cariñosos e independientes. Con ellos aprendes a amar de manera incondicional, respetando el espacio del otro. Soy hija única, pero mi compañero de infancia fue Pucci, un gato que murió cuando yo tenía 10 años”.

Alice fue buena estudiante, sus materias favoritas eran la historia y las matemáticas. El deseo de ampliar su formación la llevó a recorrer el mundo; estudió en Italia, España, Inglaterra y México. Desde hace cuatro años vive en nuestro país. “En Italia siempre hemos tenido cariño por México. Mi tesis de licenciatura la hice sobre el Artículo 27 de su Constitución y los problemas relacionados con la tierra. México es como mi primer país, lo que más me gusta es su gente, el cielo y su luminosidad”, dice Alice Poma.

Ella es doctora en ciencias sociales aplicadas al medio ambiente por la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla, España, y académica del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM. Además colabora con el Seminario Permanente Agua, Territorio y Medio Ambiente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas de España.

Sus temas principales son los conflictos socioambientales y la acción colectiva, con énfasis en su dimensión emocional. Alice señala que el cambio climático es la causa de la crisis socioambiental que vivimos, que somos la única especie que está destruyendo el ambiente y que sin un medio ambiente sano no hay sociedades sanas. La joven científica explica que desde la década de 1990 diversos sociólogos han analizado cómo las emociones influyen en los movimientos colectivos. Pretende entender cómo el vínculo afectivo por ciertas regiones permite organizarse para protegerlas pues emociones como la indignación, el apego a los lugares de nacimiento o de residencia o el aprecio de valores globales como el agua son muy importantes para la defensa del ambiente.

La doctora Poma, quien habla cuatro idiomas y es corredora, nadadora y montañista, investiga también la influencia de la cultura y del género en la sensibilidad. Señala que la sensibilidad suele relacionarse sólo con mujeres, pues hay factores culturales que hacen que muchos hombres, generalmente educados para no expresarse, se sientan incómodos al mostrarse sensibles.

Alice se autodefine como una investigadora llena de pasión, constancia, paciencia e inquietud que en su labor también se enfrenta con obstáculos como el estrés y la frustración porque muchas veces los resultados de las investigaciones tardan en llegar. “La pasión es necesaria para superar este agobio”. Para la joven, autora de un libro y de varios artículos y capítulos de libros trabajar en la UNAM es un orgullo y la oportunidad para desarrollarse como persona e investigadora con un compromiso social.

Considera que es importante para las mujeres ganar espacios ya que podemos tener perspectivas diferentes y enriquecer la generación de conocimientos.