¿Quién es? 239

Mercedes Jiménez del Arco

Itzel Espinosa Olvera

Foto: Arturo Orta

“En mi carrera museística aprendí a dar el mensaje pensando siempre en el público, no en la colección, ni en la museografía. Debes entender qué piensa el visitante y cómo puede interpretar algo distinto a lo que tú le dices, cómo lo transforma y lo hace suyo”, afirma Mer, como le llaman quienes la conocen bien. Nació en Ciudad de México pero se fue a vivir a Guadalajara. En la Universidad Autónoma de Guadalajara y en un viaje a Egipto descubrió que le apasionaba la arqueología. Poco después se tituló en esa ciencia en la Escuela Nacional de Antropología e Historia en la Ciudad de México.

La arqueología siempre ha sido su pasión, aunque finalmente no se dedicó a ella porque la vida la fue llevando por otros campos y pasiones. Casi al terminar la carrera participó en un proyecto arqueológico de Universum Museo de las Ciencias y tuvo su primer acercamiento a la divulgación de la ciencia. Más tarde en el Papalote, Museo del Niño de Chapultepec, trabajó en la adaptación de un taller arqueológico para niños y comprendió la capacidad de los pequeños para entender la ciencia. En Papalote llegó a ser coordinadora del taller antropológico y de exposiciones temporales, gerente de proyectos y exposiciones y subdirectora de proyectos internacionales.

El Papalote la formó tanto en el ámbito científico como en temas culturales y de ciencias sociales en general, pero se fue alejando de su carrera. La nostalgia por la arqueología la hizo mudarse con su hijo y su esposo a Casas Grandes, Chihuahua, donde dirigió el Museo de las Culturas del Norte en la Zona Arqueológica de Paquimé, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Cuatro años después regresó a Papalote, donde colaboró con Bertha MacGregor y Marinela Servitje para inaugurar la sede de Papalote en Cuernavaca, Morelos, la cual dirigió. Años después regresó a Ciudad de México como Subdirectora de Programas Educativos de Universum, un periodo de retos enfocado a la divulgación de la ciencia. Actualmente la Mtra. Jiménez del Arco dirige el Museo de Historia Natural de la Ciudad de México (MHN), ubicado en el Bosque de Chapultepec, en donde tuvo que emprender una renovación con la cual después de más de 50 años este recinto mejoró en contenido y museografía. En marzo de 2018 se abrieron al público cuatro salas rehabilitadas, respetando la arquitectura original así como su vocación pedagógica en ciencias naturales, además de enfatizar la megadiversidad de México.

Mercedes comenta que el renovado MHN conecta a los jóvenes a través de ambientes, piezas de colección, dispositivos multimedia, estímulos visuales y sonoros; motiva e inspira a generaciones actuales y futuras a acercarse a temas científicos, hacerlos conscientes del cuidado del ambiente y detonar las carreras de futuros científicos. Bajo esta línea, recientemente realizó una maestría en aprendizaje, educación y neurocognición que le ayudó a entender cómo se dan esos procesos y a usarlos en experiencias museísticas.